Jorge Hernández Fernández: Saúl Blanco: “Después de mucho trabajo y sufrimiento, he vuelto a sentirme jugador”
Para Saúl Blanco (Oviedo, 1985) el baloncesto es una forma de vida. El que fuera uno de los proyectos nacionales más interesantes de los últimos años, ha vivido un calvario de lesiones que le han apartado de la élite para recalar en el CB Prat, el equipo revelación de la temporada en la LEB Oro, que se quedó a solo un paso de disputar la final por el ascenso a Liga Endesa ante Manresa. Con un largo recorrido en equipos como: Fuenlabrada, Málaga, Tenerife o Sevilla, ahora ha vuelto a sentirse jugador de baloncesto y quiere seguir sintiéndolo hasta que el cuerpo aguante.
Ha pasado ya un año y medio de tu última lesión grave. ¿Has tenido miedo de volver a jugar al baloncesto desde entonces o es algo totalmente superado?
Miedo no, lo que tenía era muchas ganas de volver desde el primer momento que me lesioné. En mayo de 2015 tuve el accidente en el brazo y luego se enlazó seguido con la lesión de rodilla, pero desde el momento que salí de quirófano ya afronté la recuperación con ganas de volver a entrenar, jugar y competir.
¿Cómo te encuentras ahora mismo?
Físicamente estoy bien. El último pequeño problema que tuve está superado y estoy cuidándome mucho. Haciendo ejercicios y tratamientos, que es algo que no puedes dejar cuando tienes un periódico de vacaciones, porqué sino cuesta mucho volver.
¿Pensaste en algún momento en la retirada tras la primera lesión o durante el proceso de recuperación?
Cuando tuve la lesión de rodilla, el médico me dijo que había que ser realistas y que podría existir esa opción, pero al final dices, me encanta este deporte y me encanta entrenar… así que pones todo lo que está en tu mano para intentarlo y después de mucho trabajo, sufrimiento, fuerza de voluntad y en algunos momentos dolor, todo tiene recompensa y he podido volver a sentirme jugador de baloncesto.
Tras un año sin jugar con demasiada regularidad en el Betis, decides regresar a LEB Oro para jugar en el Prat, ¿A qué se debe este cambio?
Viene de atrás. Cuando estás dos años casi parado lo que quieres es jugar. Llega la opción de ir a Sevilla con Alejandro (Martínez), que ya lo conocía de Tenerife y llego a una ciudad increíble y un club fantástico, donde el inicio de temporada es complicado porque no empezamos todo lo bien que nos gustaría. Cambiamos de entrenador y con la llegada de Oscar (Quintana) el equipo no iba bien. Hay cambios, se fichan jugadores, tenemos 13 fichas y lógicamente sobra uno y me tocó a mi. Pasaron las semanas y los meses y seguía sin poder estar ni siquiera en el banquillo por decisión del entrenador. Pasé un par de meses complicados, pero surge la llamada de Arturo que me ofrece minutos y continuidad y no me lo pienso. Me pongo de acuerdo con el club, que no me pone ningún problema y al final me voy para el Prat a jugar minutos, en un equipo que ha sido la revelación de la temporada, con un año histórico donde la gente se ha divertido mucho viéndonos jugar.
¿Cómo cambia el trabajo de fisioterapia en clubes importantes y con recursos como Málaga o Tenerife respecto a un club modesto como el CB Prat?
Al final el fisio está siempre ahí. En el Prat han hecho un trabajo muy bueno y me han ayudado siempre que lo he pedido. Luego está el trabajo del propio jugador, a medida que vas cumpliendo años conoces más tu cuerpo y sabiendo como hay que gestionar los dolores que van surgiendo. Hay que ser constantes con un trabajo de prevención y ante cualquier problema saber que puedes recurrir al fisioterapeuta.
Para un jugador tan explosivo como tú, sufrir este tipo de lesiones supone también un cambio en el estilo de juego ¿Qué es lo más complicado a la hora de pasar de ser un matador a un tirador por ejemplo?
No me considero un tirador (ríe). Al final tienes que evolucionar, no solo por las lesiones, y cambiar un poco la forma de jugar y adaptarte a los nuevos tiempos. Esa es la clave. Puedes perder por un lado pero ganar por otro. Si te pones a mirar por qué hay tantos jugadores veteranos en la liga, no todo es explosividad o físico y al final en los partidos importantes, es más importante la cabeza o el conocimiento del juego que estar bien de piernas.
Casi dos años parado por una lesión puede ser un golpe crítico para muchos jugadores, sin embargo has demostrado poder regresar a la máxima competición ¿Cuál es el factor más importante en un proceso tan largo parado?
Cada lesión y cada cuerpo es diferente. No hay dos lesiones iguales ni dos recuperaciones iguales. La clave es mentalizarte, tener un objetivo en la cabeza e ir a por ese objetivo siendo positivo aunque sea complicado. Luego está el trabajo y saber sufrir.
Durante dicho proceso de recuperación elegiste tu tierra, Asturias, para recuperarte ¿Por qué?
Yo tenía otro año de contrato en Tenerife y me lesioné la rodilla; ellos querían terminar con mi contrato y salí del club. Me vi recién operado, cuatro días después de salir de quirófano, en mi casa sin poder moverme, sin equipo y sin apoyo de un profesional. Estuve con mi familia, me busqué un fisio y un entrenador de mi confianza y todo salió bien. Ha sido un año complicado y duro en casa pero me ha venido bien para darme cuenta de muchas cosas y madurar aún más.
¿Cuál es el objetivo a medio plazo de Saúl Blanco?
El mismo que llevo teniendo desde hace muchos años. Jugar, divertirme y pasármelo bien. Creo que todavía puedo jugar un poco más. Quiero que la gente se lo pase bien viéndome jugar y esté donde esté, ayudar al equipo a que las cosas salgan.
¿Le pones una fecha a tu retirada?
Hay que ir año a año, paso a paso. Cuando llegue el momento de que no tenga ganas o los dolores superen esas ganas, entonces quizá haya que dar el paso, pero de momento las ganas de seguir jugando están muy arriba.
Hace apenas unas semanas sufriste una nueva lesión que te impidió jugar los partidos de semifinales de LEB Oro ante Melilla, ¿Ha sido más grave de lo que parecía en un primer momento?
No fue nada grave ni a largo plazo. Fue una pequeña rotura en el sóleo, pero probándome, la pierna me dio un toque de que no estaba lista. Si hubiésemos podido llegar a la final a lo mejor hubiese acabado jugando. Fue una pena por todo el trabajo a lo largo de la temporada y llegar a la parte más bonita y no poder ayudar al equipo, pero ya está olvidado y trabajando en casa en vistas a los próximos meses.
A nivel personal ¿Cómo te has sentido en esta media temporada con el CB Prat? ¿Te ha sorprendido algo en especial?
Viniendo de clubes con una estructura mucho más grande, me sorprendió que todo lo lleven entre cuatro personas. Es algo que tiene mucho mérito por todo lo que conlleva el llevar un equipo profesional y siendo la primer temporada donde se desvinculan del Joventut de Badalona, que no es nada fácil. En la ciudad he estado muy cómodo. Me he sentido muy arropado por toda la afición, tuve un gran recibimiento y solo tengo buenas palabras.
La mezcla entre jóvenes y veteranos ha funcionado a las mil maravillas ¿Qué consejos le darías a jugadores que tienen toda su carrera por delante como Emi Cate o Caleb Agada?
No soy nadie para dar consejos (ríe), pero lo que digo siempre: a los jugadores jóvenes, que no dejen de trabajar y aunque lleguen momentos malos que siempre hay, como partidos donde no salen las cosas y cuando eres joven te afectan más, que miren para adelante, disfruten y trabajen.
¿Cuánta importancia le das a que un técnico como Arturo Álvarez haya estado en el equipo para tu llegada a un club tan modesto?
Fue clave. Si él no me llama para proponérmelo yo ni me lo planteaba, porqué tenía contrato hasta este junio con Sevilla y tenía pensado cumplirlo. Su llamada fue clave para que se me pasase la idea por la cabeza.
¿Conocías algo del equipo antes de llegar?
Conocía a Arturo, al médico y a Marc Blanch. Luego llegó Pep Ortega, que también había jugado contra él. Había visto muchos jugadores del Prat, pero personalmente no conocía a casi nadie.
¿Cómo ha sido tu día a día en una ciudad pequeña como el Prat?
Entrenábamos bastante y no he podido hacer demasiada vida. Aprovechaba el tiempo libre para estudiar (Máster de Administración y Dirección Financiera), descansar y de vez en cuando salir a despejarme un poco y descubrir Barcelona, que está al lado del Prat.
Hablando de tus anteriores equipos, viven etapas muy contrastadas: Unicaja lleva temporadas algo irregular, Tenerife logró la Champions League y sigue a gran nivel, Fuenlabrada también ha logrado un año histórico, mientras que el Betis ha descendido a LEB Oro ¿Qué opinas de todos ellos?
Es cierto que Fuenlabrada está en un momento increíble tras todos los problemas hace cuatro o cinco años, pero vienen haciendo las cosas muy bien. Se clasificaron para la Copa del Rey, que es un gran premio al trabajo bien hecho. Tenerife ha estado algo más irregular, aunque el año pasado si que tuvieron una temporada histórica jugando la Copa, playoffs, ganando la Champions League… este año las aspiraciones eran revalidar el título, aunque se quedaron a las puertas, pero lograron repetir en la Copa y clasificarse entre los ocho primeros. Se están consolidando en la liga con el objetivo de ir mirando para arriba.
Unicaja venía de un año fantástico ganando la Eurocup y ahora han tenido un año algo irregular, aunque siempre están ahí arriba luchando por todo. Es un equipo de los grandes, de los que los jugadores les gusta jugar allí. Sevilla en cambio, ha tenido un año muy duro, porque hicieron el equipo rápido, prácticamente llegaba un jugador cada semana y eso fue un hándicap para la adaptación. Cambios de entrenador, de jugadores, resultados en contra abultados… todo mima la moral. No se que pasará, estarán en LEB Oro y harán un equipo para volver a subir rápido. Es una ciudad increíble y el trato con los jugadores es fantástico y espero que tengan mucha suerte.
¿Te gustaría enfrentarte al Betis la temporada que viene con la camiseta del Prat?
Es algo pronto para hablar de camisetas. Me gustaría volver a jugar contra ellos, he dejado buenos amigos en el cuerpo técnico y la ciudad. No conocía Sevilla y tiene un gran ambiente donde todo el deporte se vive muchísimo. Los colores del Betis tienen una gran masa social.
Hace unos días se hizo oficial que Arturo Álvarez no seguirá dirigiendo al Prat la próxima temporada, ¿Te ha sorprendido su marcha?
La verdad que no. Llevo tantos años en esto que muchas cosas no me sorprenden. Equipos que cambian de un año para otro prácticamente toda la plantilla… Hay amigos que me dicen “¿el año que viene donde vas?”, “¿ Otra vez preparando las maletas?”. Esto es así, la vida del jugador a veces puede ser un poco más tranquila que la de un entrenador, porqué hay casos de jugadores que pueden estar siete u ocho años en el mismo club, sobre todo en ACB. Sin embargo para los entrenadores, es más complicado estar más de 3 años en el mismo equipo. Arturo ya hizo un año muy bueno con Araberri y este año llegó al Prat y ha hecho una temporada histórica… no sé lo que le deparará el futuro, pero seguro que es algo bueno.
¿Crees que las altas exigencias que impone la Liga Endesa a los equipos de LEB Oro para subir están haciendo perder la competitividad en esta categoría?
Depende de cada sitio. Yo llevaba muchos años sin jugar en LEB y había ciudades donde el pabellón estaba absolutamente lleno. Hay otras ciudades donde se vive menos porque viven más otros deportes. Las exigencias para subir ahora están mejor después de eliminar los cánones, algo que impidió por ejemplo a Burgos no poder subir hasta pasados tres años; eso podía hacer que los equipos perdieran algo de motivación. Ahora creo que cualquiera de los equipos que han estado arriba para subir, si se lo hubiesen planteado, habrían podido.
¿Has tenido alguna oferta para la temporada que viene?
Es algo pronto todavía, de momento no he recibido nada todavía. Llevo dos semanas de vacaciones y estoy limpiando la cabeza tras un año muy complicado. Ahora quiero descansar y desconectar y más adelante ya empezaremos a escuchar.
La entrada Saúl Blanco: “Después de mucho trabajo y sufrimiento, he vuelto a sentirme jugador” aparece en Gigantes del Basket.
Ver Fuente
Comentarios
Publicar un comentario